El vintage no es una moda. Es un arte, un estilo de vida. Anímate a decorar tu hogar con muebles y objetos que perduran en el tiempo.
Cuando usamos el término vintage, nos referimos a aquellos objetos, muebles y decoraciones antiguas. Fueron elementos cotidianos o de lujo en alguna época especifica y hoy se convierten en toques de color y glamour en la decoración de nuestro hogar.
En los últimos años, la estética y el fanatismo por ropa, accesorios y decoraciones se segunda mano a crecido. Podemos encontrar cientos de tiendas exclusivas, o «mercado de pulgas» en el que encontramos los objetos más excéntricos y divertidos.
Si todavía no te animas a ambientar una habitación en completo estilo vintage, puedes incorporar pequeñas piezas que le crearan un toque fresco y con estilo. No hay que tener miedo a mezclar y ser creativos.
Podemos empezar visitando la casa de nuestra abuela. Siempre hay alguna que otra reliquia familiar que pasa de hija en hija. Muchas veces estos objetos pasan desapercibidos. Es sólo cuestión de encontrarlos y usar nuestro buen gusto para incorporarlos en nuestros ambientes. Podemos usar lámparas, marcos, cuadros, almohadones, vajilla, posters, etc.
Otra de las opciones es el reciclado. Cada vez hay más artistas independientes y artesanos que se dedican a restaurar piezas antiguas y darle un toque moderno y atrevido. Si no quieres gastar mucho dinero en estas piezas, puedes probar hacerlo tú mismo. Con un poco de pintura, accesorios y tiradores originales, puedes crear tu propio mueble vintage con un toque personalizado. Hay muchos blogs que nos enseñan el paso a paso para «customizar» objetos decorativos y muebles de todo tipo. ¡Anímate!
Deja volar tu imaginación y tu creatividad y añádele un toque vintage a tu hogar. Explora las casas de antigüedades y revistas especializadas. No tengas miedo a mezclar y probar cosas diferentes. ¡Adelante!
