Si estamos interesados en almacenar objetos ahorrando espacio y en darle un aspecto nuevo a nuestro despacho, habrá que darle vueltas a nuestra imaginación. Algunos consejos para llevar a cabo este objetivo son:
Crear nuestro propio despacho en casa no siempre es fácil. Muchas veces hay que introducir elementos que no son exactamente propios de una vivienda y que además ocupan mucho espacio: archivadores, material especializado para nuestro trabajo, etc.
Primeramente, cuando pensamos en decorar nuestro despacho tenemos que tener en cuenta que imagen queremos dar y si será de uso público o privado.
Además podemos utilizar muebles que nos permitan varios usos, como por ejemplo una estantería que nos sirva también como mesa. Los armarios serán bienvenidos en nuestra oficina para colocar cestas, papeles, herramientas, accesorios…
También tenemos que tener en cuenta el color que primará en nuestra oficina, ya que tiene que permitirnos trabajar de forma energética pero sin que llegue molestarnos el tono, por ello escapa de colores demasiado «chillones».
Con estos consejos no querremos trabajar fuera de casa.
