La colocación de parquets a medida se ha convertido en una opción cada vez más popular entre quienes buscan dotar de un toque de elegancia y personalización a sus hogares o espacios comerciales. Este tipo de suelo no solo destaca por su belleza natural, sino también por su versatilidad y la capacidad de adaptarse a diferentes estilos y necesidades. La elección permite a los propietarios no solo hacer a medida el diseño de su suelo, sino también asegurar que se ajuste perfectamente a las particularidades de su espacio.
Uno de los aspectos más destacados es la posibilidad de diseñar el suelo según las preferencias y necesidades específicas del cliente. Esto implica elegir entre una amplia variedad de maderas, colores, patrones y acabados, lo que permite crear un suelo que se adapte perfectamente al estilo y la decoración del espacio.
La exclusividad va más allá de la simple elección de materiales. También incluye el diseño del patrón de instalación, que puede variar desde las clásicas espigas hasta patrones más contemporáneos como el trenzado o el tablero de ajedrez. Esta libertad creativa permite a los propietarios jugar con el diseño del suelo, haciendo que no sea solo un elemento funcional, sino también una pieza clave en la estética del espacio.
Otro de los grandes beneficios de optar por este tipo es la garantía de calidad y durabilidad que ofrece. A diferencia de los suelos prefabricados, que a menudo están limitados en cuanto a materiales y acabados, se fabrican con maderas de alta calidad seleccionadas específicamente para el proyecto. Esto no solo asegura un acabado superior, sino también una mayor durabilidad y resistencia al desgaste.
Las maderas más utilizadas incluyen roble, nogal, cerezo y jatoba, entre otras. Cada una de ellas tiene características únicas en términos de color, textura y dureza, lo que permite a los propietarios elegir la opción que mejor se adapte a sus gustos y necesidades. Además, los acabados individualizados, como el barnizado mate o brillante, el aceitado o el cepillado, aportan una capa adicional de protección y realzan la belleza natural del material.
Una de las ventajas más notables de la colocación es su capacidad para adaptarse a espacios irregulares o con características arquitectónicas únicas. En muchas construcciones, especialmente en las de estilo clásico o rústico, es común encontrar habitaciones con formas irregulares, techos inclinados o esquinas difíciles. Un suelo a medida permite superar estos desafíos, ya que cada tabla se puede cortar y ajustar para encajar perfectamente en el espacio.
Además, son ideales para crear transiciones suaves entre diferentes áreas de una casa o un local comercial, como entre la sala de estar y el comedor, o entre los pasillos y las habitaciones. Esto se traduce en un flujo visual armonioso que contribuye a una sensación de continuidad y amplitud en el espacio.
La instalación requiere la intervención de profesionales experimentados, ya que el proceso es considerablemente más complejo que el de un suelo prefabricado. El primer paso en la instalación es la preparación del subsuelo, que debe estar completamente nivelado, limpio y seco para garantizar la estabilidad. Cualquier imperfección en el subsuelo puede afectar la durabilidad y la apariencia final del suelo, por lo que este paso es crucial.
En COM PARQUETS, comentan: “Ofrecemos el asesoramiento técnico necesario para una correcta y sostenible instalación del flotante, laminado y tarimas, aumentando así la vida útil de los mismos”.
La colocación de parquets ofrece una solución a medida y de alta calidad para quienes buscan un suelo único y duradero. Con un diseño que se adapta perfectamente a las necesidades del espacio y un proceso de instalación que garantiza la máxima precisión, los suelos a medida son una opción ideal para aquellos que desean combinar funcionalidad, belleza y personalización en su hogar o negocio.